Rodrigo Ciborro, es un niño de tan solo cuatro años que es un pedazo de aficionado a esto del mundo de los toros. Rodrigo ya ha toreado por primera vez una mamona el día de la capea de su peña, con tan solo tres años se puso delante y ya apuntaba maneras.
La verdad que lo bonito de la fiesta es que la gente joven siga sus mismos pasos que la de sus mayores. Los juguetes de Rodrigo son cuatro toros de plásticos un camión donde trasporta a sus toros dos cuernos y un capotito, y se tira todo el día jugando con ello. Tiene dos hermanos que también le gusta esta aficion, se llaman Andrea y Diego, y entre los tres se montan sus corridas de toros creyéndose que están en Madrid, disfrutando de una gran faena de en sueño y llegando a pensar que ese juego que hacen en su habitación, algun dia llegue a ser realidad, y poder torear junto a dos maestros a cada lado. Pase lo que pase les deseo mucha suerte para ellos tres.
